Cuentan que un hombre tenía un perro acostado en el piso de madera de su casa...
Con la particularidad que cada vez que el perro se movía, se quejaba.
El amigo del hombre que había ido de visita se extrañó al ver al perro tumbado, molesto y aullando cada vez que hacia determinado movimiento.
Así que decidió preguntar...- ¿qué le pasa a tu perro que se queja de esa manera?.-
Ahhhhh es que está acostado sobre un clavo y cada vez que se mueve le duele.-
Bueno ¿y por qué no se corre?.
- Creo que porque "le molesta lo suficiente como para quejarse pero no lo necesario como para cambiar de lugar".
Cuantas situaciones de este tipo se nos presentan a diario en nuestra vida y nos quedamos en la queja...sin intentar movernos para que termine la molestia?
Será que a veces nos acostumbranos al clavo y nos queda mas cómodo quejarnos que intentar el cambio?
Tendremos miedo a no saber que hacer cuando no tengamos de que quejarnos...
Cuanto hay para pensar y mucho mas para hacer...
Fuente:
Es como cuando uno espera que otro haga algo por nosotros, pero en ves de hacer algo , nos quejamos….
Muy cierto hay personas que le es más cómodo quejarse pero no tienen el valor de dejar ciertos apegos .
Muy cierto hay personas que le es más cómodo quejarse pero no tienen el valor de dejar ciertos apegos .
Excelente mensaje jordan.
Excelente reflexión,desgraciadamente siempre nos acostumbramos a lo que nos agota y está en nosotros cambiarlo .ya sea por costumbre o miedo al cambio…gracias,gracias,gracias
Dejar un comentario