JORDAN SANCHEZ - PSICOLOGO & MINDFULNESS MASTER

El Pastizal



 

Hace poco una estudiante de Puerto Rico que cursaba la maestría en meditación me compartió de su experiencia personal.  

En una videoconferencia me describió como su vida se había transformado del miedo y la angustia constantes a una vivencia de expansión y gozo.

También me comentó que por cortos periodos se perdía nuevamente en la corriente de los pensamientos, se permitía ahogarse en el ruido mental y en la lucha con las emociones, solo que ahora todo esto ocurría bajo una nueva cualidad: en conciencia.

Ella podía retirar conscientemente su atención del aquí y del ahora y de la misma manera volver al presente.

Este ejercicio de perderse y encontrarse, de salir del estado de paz interior y entregarse nuevamente al sufrimiento mental ella le llamo: ir al “pastizal”.

Ella no había tenido ninguna información previa de los temas espirituales de oriente y mucho menos del mundo de la meditación.

Mi querida alumna había recibido una hermosa revelación en su inocente búsqueda.

Me sorprendió grandemente su ejemplo del “pastizal” ya que coincide perfectamente con un texto antiguo de la sabiduría oriental llamado “Los 10 Toros del Zen”.

Son versos inspirados en la autorrealización personal y el reconocimiento de nuestra alma, es una obra poética que habla sobre la búsqueda espiritual.

El primer verso dice así:

“En los pastos del mundo aparto incesantemente las altas hierbas en busca del Toro siguiendo ríos desconocidos; perdido por caminos que atraviesan montañas lejanas, me faltan las fuerzas y mi vitalidad se agota, y no puedo encontrar al toro. Al caer la noche, sólo oigo el canto del grillo en el bosque.”

La primera prosa sigue de esta forma:

 “El toro nunca se ha perdido. ¿Qué necesidad hay de buscarlo? Únicamente la separación de mi verdadera naturaleza me impide encontrarlo. En la confusión de los sentidos pierdo incluso sus huellas.”

En el texto se describe al toro como nuestra energía vital, nuestro Ser, el pastizal es el mundo, con sus estímulos sensoriales que nos atrapa y nos hacer perder el sentido de lo que realmente somos, la búsqueda incesante ocurre cuando miramos en el lugar equivocado sin saber que se busca.

El mundo no es malo ni bueno, simplemente es, y nada nos dice de quien realmente somos, allí no encontraremos la respuesta de nuestra esencia.

En mi alumna vi la prueba viviente que no se necesita conocimiento ni experiencia previa para alcanzar eso que tanto buscamos.

El deseo firme y la intención de no querer seguir viviendo en el sufrimiento la llevaron a mover toda su atención hacia su Ser con disciplina y constancia.

 

Fue entonces cuando el milagro ocurrió, ella había alcanzado sin saberlo ese estado de iluminación que inútilmente algunos buscan en libros y técnicas complejas.

Es tan simple como cerrar nuestros ojos y comenzar a mirar dentro, sin juicio sin lucha, sin hacer absolutamente nada, simplemente nos convertimos en el observador.

Las técnicas de meditación nos ayudan a poner distancia del pensamiento caótico, a desarrollar la conciencia plena del observador y a poder encontrar eso que tanto hemos buscado afuera…

Si quieres salir del pastizal, detén la búsqueda y mueve tu atención hacia adentro, aquí y ahora.

Jordan Sanchez


13 comentarios


  • Yesenia Moyeno

    Estoy pasando por una situación de separación y me estoy hundiendo en una grande depresión leo trato de seguir mi vida en el gym trabajo pero cada día es más difícil no se como hacer para salir y no seguir hundiendo.


  • Norma

    Muy interesante y alentador , gracias Jordan


  • Olfa Roman

    Aawww este hermoso escrito me llegó al alma!! Es increíble como el ser humano se pierde en el drama, el dolor, la pena el llanto!! ………
    Mi vida a cambiado , (como dice el dicho) del cielo a la tierra…no solo salí del pastizal, si no que encontré el redil donde fluye leche y miel!!
    Gracias Jordan por tu amor y tu sabiduría!!


Dejar un comentario


Por favor tenga en cuenta que los comentarios deben ser aprobados antes de ser publicados